miércoles, 29 de julio de 2009

COMO SOLICITAR LA PRESTACION DE DESEMPLEO POR INTERNET

Después de mis peripecias con mi antigua empresa, ya he acabado el proyecto para el que me habían contratado después de echarme.

Ahora tocaba el darme de alta en el INEM y solicitar la prestación por desempleo. Después de tantos años currando, ha llegado el momento de chupar de la teta del estado.

Mis antiguos compañeros de empresa y ahora del INEM me habían advertido de las colas trembundas que me iba a encontrar para solicitar la prestación. Alguno de ellos tuvo que ponerse a la cola a las 4:00 am para conseguir que les atendiesen.

Esto que me habían contado me puso un poco en alerta, por lo que hice una primera inspección en mi oficina del INEM. Me acerqué a las 10:00 am y me informé de los pasos a seguir en la ventanilla de información. Los pasos eran 3, pasando por diferentes "ventanillas":

Letra C: Alta como demandante de empleo.
Letra A: Orientación, información varia y recogida del formulario de solicitud de la prestación. En esta "ventanilla" también te daban hora y día para la entrega del formulario y documentación varia (Certificado de empresa y Libro de Familia en mi caso).
Letra B: Bajo previa petición de hora en la "ventanilla A" se entrega toda la documentación y se cierra el proceso.

Después de conocer todos estos pasos, y aunque no era una oficina del INEM con mucha gente, decidí que ya era hora de usar las nuevas tecnologías para los trámites con la administración. Me puse manos a la obra y me leí toda la información de la Web del INEM.

Los pasos eran sencillos:

Paso 1: Darse de alta como demandante. Para este paso no queda más remedio que acercarse a una oficina del INEM. Pero es lo más sencillo de todo y sin colas. En menos de 5 minutos está todo hecho.
Paso 2: Rellenar el formulario para la solicitud de la prestación por desempleo por la Web. Para esto es necesario disponer de un DNI digital o de un certificado de la FNMT.
Paso 3: Acudir a una oficina del INEM (da lo mismo la que sea). Este paso es posible saltarselo si se dan dos condiciones: que la empresa haya entregado el certificado de empresa digitalmente y que no tengas hijos, de esta manera no hay que presentar el libro de familia.

Resumiendo, es posible que con una única visita al INEM (Paso 1) resuelvas todos los pasos para recibir la prestación por desempleo. A veces, las nuevas tecnologías y la administración pública sirven para algo. La pena es que en este país somos bastante retrasados a la hora de aceptar nuevos métodos y formas de vida.

La verdad es que te tampoco me preocupa mucho, mientras yo pueda seguir aprovechándome, seré feliz. Desde aquí le doy las gracias a las nuevas tecnologías, gracias por hacernos la vida más fácil.

sábado, 11 de julio de 2009

¿CRISIS O ENGAÑABOBOS?

Llevo bastante tiempo sin escribir esperando a solucionar temas privados. Hoy estoy en la recta final y a punto de cerrar los últimos flecos, y creo que es el momento de poner de manifiesto mis últimas vivencias. Creo que os vais a entretener muchísimo con la historia que os voy a contar a continuación:

Resulta, que hace unos meses, la empresa que hace menos de dos años me contrató vendiéndome un proyecto bastante interesante, comenzó la venta y fusión a una multinacional. Hasta aqui todo parecía dentro de lo normal. Mi futuro parecía mejorar, ya que iba a entrar a formar parte de una gran multinacional y lo mejor de todo es que mi nuevo centro de trabajo iba a estar a 5 minutos de casa. Esto, en una gran ciudad, no se paga ni con dinero.

Pues, cuando todo parecía fantástico, comenzaron a torcerse las cosas. Todos mis compañeros iban pasando a la nueva empresa matriz, incluídas las personas que estaban en mi departamento, bajo mi responsabilidad. Todo iba tomando un aspecto muy extraño y comenzaba a olerme algo malo.

A los pocos meses de empezar el año, me reunieron para comunicarme verbalmente que iba a ser despedido. Pero que la fecha efectiva no sería hasta dentro de tres meses. Mientras querían que acabase uno de los proyectos que tenía entre manos. Del resto de proyectos que estaban bajo mi responsabilidad, no tenían muy claro que harían con ellos.

Lo que estaba claro es que mi baja no era por falta de proyectos o por bajo rendimiento, sino por el "cost obsession". Todo esto no tenía mucho sentido, porque una cosa es rebajar costes, pero otra es el hacerlo donde más falta hiciese. De todas formas, las multinacionales son así, los financieros hacen un trabajo y los responsables de la operación, hacen el suyo.

Lo que estaba claro es que las cuentas de este año no salían y el encargo a los financieros estaba claro; Recorte de gastos y dar lo mejores resultados posibles de cara a los accionistas. Aunque este año los mejores resultados serían dar las menores pérdidas posibles. El caso es que, por un lado, los financieros van recortando gastos y los responsables de operaciones, que están dando la cara frente a los clientes, deberán afrontar con menos recursos los proyectos.

Todo esto es un gran problema, ya que se están tratando de forma independiente los costes financieros con la productividad de una empresa. Esto, al final radica en una mala imagen frente al cliente y a la larga, en una disminución de la productividad, por lo tanto, del ingreso de dinero e incluso de la pérdida de los contratos ya firmados.

Hablando coloquialmente, lo que estaban haciendo es recortar gastos a la hora de fabricar un coche, en el que los financieros imponen un gasto máximo en el que se puede incurrir y por otro lado, la cadena de producción sólo puede fabricar esos coches con ruedas cuadradas, ya que el dinero no da para más. Y claro, ¿que pasará cuando le vendan ese coche a un cliente y este vea que no se mueve? ¿Qué pensará ese cliente? ¿Reclamará? ¿Pagará?

Volviendo con el hilo de la historia, mi decisión fue la de comenzar a buscarme el futuro fuera, ya que mi situación allí era agonizante. Entre medias de todo esto, mi "sosio" me mandó un link de un blog que hablaba de como "agarrarte" fuertemente a la silla de tu empresa. En ese blog aparecían todas las opciones por las que podías poner difícil tu salida en una empresa. Allí se hablaba de mujeres embarazadas, personas con baja de enfermedad, etc. Pero había una situación que encajaba perfectamente en mi situación. La petición de reducción de jornada por cuidado de hijos.

Estuve pensando durante muchas semanas si movía ficha con esa jugada o si me estaba quietecito y asumía mi despido. Después de muchas vueltas a la cabeza y pensando en la injusticia que se estaba cometiendo conmigo, me eché para adelante y tome posiciones.

La decisión final de solicitar una redución de jornada vino motivada, sobre todo, por la injusticia que creía que se estaba cometiendo conmigo. La gran multinacional prefería chaviles y becarios que no eran ni mileuristas, antes que a personas que teníamos un alto bagaje en el sector. Preferían largar a personas con familias e hipotecas, antes que a chavales sin ataduras, hipotecas y que aún vivían con sus padres. En resumen, preferían a gente sin experiencia y mal pagada, antes que a personas con pelos en los cojoxxx y experiencia más que sobrada.

Durante el año y medio que preseté mis servicios en esta empresa, he recibido varias felicitaciones en los diferentes clientes en los que he estado, he viajado sin rechistar a diversos países porque la empresa me lo pidió y ¿es así como luego te pagan los servicios prestados?

Después de dar este paso adelante, los grandes juristas de esta multinacional pusieron el grito en el cielo y estuvieron buscando la fórmula para echarme atrás el jaque-mate que les había puesto encima del tablero. Por supuesto, no tuvieron elección y decidieron negociar mi despido, obteniendo más dinero del que querían darme inicialmente. Esto hacía que mi estancia en el paro fuera más agradable y pudiera darles a mis hijos, durante más tiempo, las mismas cosas que hasta hoy les he podido dar. No hablo de vicios indecentes, sino de sacarles a comer algún día a un burguer, comprarles una consola por su cumpleaños, etc. O sea, disponer del mismo ritmo de vida, al menos durante algunos meses más.

Lo más gracioso de toda esta historia no es la jugada "maestra" que les hice, sino lo que voy a contar a continuación.

Después de varios días con diversos problemillas con mi liquidación, talones arriba y talones abajo, llegó el día que fui a ingresar mi liquidación al banco. Dos horas después de recibir mi talón e ingresarlo en mi cuenta, recibí una llamada de teléfono de esta multinacional.

Hola? eZtor? mira, es que tenemos un problemillas con uno de nuestros clientes y necesitamos tu colaboración!!!

Me estaban ofreciendo trabajo!!! dos horas después de liquidarme!!! Estaba alucinando, era para mear y no echar gota. ¿Qué puedo decir de todo esto? Únicamente, que estoy alucinando.

Para mí, esto es un resumen de lo que hoy en día se llama CRISIS.